El Palacio de Linares se construye en el último tercio del siglo XIX. Su arquitecto Carlos Colubí, lo diseña con claras influencias francesas. La dirección artística del conjunto fue encargada a D. Jose Marcelo Contreras; y Jerónimo Suñol realizó las tallas y esculturas de sus diferentes salones.
Situado en el eje Prado Recoletos, centro neurálgico de la actividad cultural y turística de la capital, el Palacio de Linares es, desde 1992, la sede del Consorcio Casa de América, que se encarga de la promoción e intercambio cultural entre España y el continente americano, en particular, América Latina y El Caribe.
Este palacio representa la culminación de las artes aplicadas en Madrid. Sus ricos salones están decorados con los mejores materiales y las técnicas decorativas más sofisticadas (dorados y policromías, estuco mármol, azulejería y mosaicos, pintura mural, textiles), siguiendo estilos como Luis XV y XVI, Rococó y Luis Felipe.
En el año 1990, se comenzaron las obras de restauración de todos los elementos decorativos. Después, y de manera pionera en el sector, se habilitó un servicio de conservación preventiva, que ha permitido asegurar el mantenimiento de los bienes restaurados. Desde el comienzo de estos trabajos, el Taller de Restauración El Barco, S. L. ha estado vinculado al proyecto, desarrollando un protocolo de actuación altamente sistematizado y riguroso, que siempre se adapta a las necesidades de la propia operativa de la institución y permite mantener sus instalaciones en uso y las visitas activas. Se articula por medio del control y seguimiento del estado de conservación de las piezas y las condiciones ambientales en las que se exhiben. Esta actividad se combina con intervenciones de restauración, que permiten atender de manera más específica a las patologías observadas durante las revisiones. Para ello, contamos con un grupo de profesionales expertos en los distintos oficios artísticos, que trabajan interdisciplinarmente junto con restauradores titulados para alcanzar las más elevadas cotas de calidad en los tratamientos.
Esta estrategia permite detectar anticipadamente la aparición del deterioro, identificar su origen y, según el caso, actuar sobre ello para eliminar o reducir su impacto negativo sobre los bienes, o bien incidir directamente sobre los objetos para recuperar su estabilidad. De este modo, se contribuye a la preservación de los elementos a largo plazo, evitando el abandono y la realización de intervenciones más costosas y traumáticas para las piezas. Solo así puede asegurarse la conservación de un patrimonio tan rico y variado como el que forman los elementos histórico-artísticos del Palacio de Linares.
A lo largo de sus más de 30 años de trayectoria, nuestra empresa ha implantado otros Servicios de Conservación Preventiva en Edificios de Interés Histórico, tales como el Palacio del Congreso de los Diputados, el Banco de España, el Museo Sorolla, el Cuartel General del Ejército y algunos Palacios de Patrimonio Nacional.
